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miércoles, 29 de febrero de 2012



EQUIPOS DE NUESTRA SEÑORA, BAEZA-3





El equipo Baeza-3 de los Equipos de Nuestra Señora participó el pasado fin de semana en la jornadas de formación de primer grado.

Fueron dos días intensos de escucha y participación, en los que Leopoldo y Mª Rosa, matrimonio de Málaga, nos recordaron, la historia del movimiento desde su fundación. su carisma que es la espiritualidad conyugal y la ayuda mutua, la vida en el equipo, la regla de vida, los puntos de esfuerzo, la función de los consiliarios, la responsabilidad y la generosidad en el día del haber.

Asimismo nos informaron de la organización estructural del movimiento, y la misión del mismo.

Fue enriquecedor la participación en los equipos mixtos con matrimonios de otras provincias con las diferentes aportaciones de cada unos de ellos.

En la oración ante el Santísimo de la tarde del sábado, se renovó el compromiso del matrimonio, finalizando el domingo con la celebración de la Eucaristía.

Estar en un equipo de Nuestra Señora es un servicio a la Iglesia y en la Iglesia, enarizado en la Palabra de Dios y en la Eucaristía, que responde a la llamada del Señor.




domingo, 26 de febrero de 2012

D. MANUEL, PARA LA REFLEXIÓN

“CONVIÉRTETE Y CREE EN EL EVANGELIO”

“Conviértete y cree en el Evangelio”, nos dijo el sacerdote el Miércoles al imponernos la ceniza en la cabeza, recordándonos las palabras de Jesús en el Evangelio de este Domingo. Es todo un programa de cuaresma para tu vida de cristiano. Contemplemos de nuevo la escena en la que el Maestro nos deja su consigna. Jesús pasea por la orilla del lago de Galilea predicando e invitando a las personas a que se sumen a su aventura del Reino. El Maestro proclama a los cuatro vientos: ¡Está cerca el Reino de Dios, convertios y creed la Buena Noticia!

Lamentablemente muchos cristianos vivimos sumidos en la indolencia, en una fe de rebajas y acogemos la venida de Dios entre nosotros como si de un simple suceso se tratase y no saltamos de gozo, conscientes de que somos partícipes de una gran Noticia. Porque a lo largo de la historia no ha habido otra Noticia que haya merecido más primeras páginas: Dios quiere salvar al hombre, Dios nos trae el cielo a la tierra y quiere incorporarnos a su aventura. Y este es el gran mensaje de Jesús: que el Reino de Dios está entre nosotros.

Pero Jesús no quiere en su Reino una masa anónima de aburridos, sino que exige una decisión firme de seguirle. Para ello, es necesario convertirse. Convertirse es salir de uno mismo y volver la mirada y la vida a otra persona. Es quitar el centro de la vida de mi egoísmo y colocarlo en el amor de Dios y del hermano. Es vivir saliendo de sí mismo para hallarnos en los otros. Porque el hombre, cuando encuentra al hermano, ya está cerca de Dios. Y cuando encuentra a Dios ya ve en cada hombre a un hermano.

Esta Buena Noticia ha cambiado la historia y necesita de corazones nuevos que la vivan y voces que la proclamen. Como ocurrió en Galilea, como ha ocurrido a través de los siglos, Jesús te dice: ¡Ven conmigo y te haré pescador de hombres!; ¡deja las redes y sígueme! Da un cambio total en tu vida, sal de ti mismo para encontrarte conmigo y proclamad al mundo de hoy la Buena Noticia: ¡Convertios, el Reino de Dios está entre vosotros!

LECTURAS Y SALMO

REFLEXIÓN EVANGÉLICA

sábado, 25 de febrero de 2012

REUNIÓN DEL MES DE FEBRERO DEL GRUPO DE LAICOS FILIPENSE

Se comenzó con la lectura y reflexión comunitaria de una oración "Razones para la esperanza", para continuar trabajando sobre nuestra aportación, logros y dificultades, que nuestra representante manifestará en el Congreso Nacional que se está celebrando este fin de semana.

LAS RELIQUIAS DE SAN JUAN DE ÁVILA VISITARÁN NUESTRA CIUDAD EN SEMANA SANTA


Las reliquias de San Juan de Ávila, Patrón del Clero Secular Español y cotitular de nuestra Hermandad, visitarán la ciudad de Baeza para estar presente en la Solemne Misa Crismal que por primera vez se celebrará en la mañana del Martes Santo en la S.I. Catedral de la Natividad de Nuestra Señora y que reunirá a todo el Clero de la Diócesis de Baeza-Jaén, para tan Solemne celebración.
En estos días se está trabajando en la programación y actos que tendrán lugar en nuestra ciudad con motivo de la llegada de las reliquias de San juan de Ávila a nuestra ciudad este próximo Lunes Santo.
La noticia era comunicada por el Excmo. Cabildo Catedral este pasado lunes a la Junta Administrativa, después de hacer la petición al Excmo. Sr. Obispo de Córdoba y éste dar luz verde a la petición, la cual ha sido recibida con gran júbilo y alegría por toda la ciudad en general y nuestra Hermandad en particular.
San Juan de Ávila es con toda seguridad una de las figuras más relevantes de la historia de Baeza. Además de ser fundador y rector de su Universidad, sede actual de nuestra Hermandad, realizó numerosas iniciativas para beneficio de los habitantes de Baeza como la creación de escuelas para niños pobres, prestó su colaboración en la proyección social de las Cofradías y Hermandades – tema para el que incluso llegó a dirigir un escrito al Concilio de Trento – fue director espiritual, ejemplo de predicador, e incluso actuó como mediador y pacificador en los graves conflictos que existían entre las grandes familias nobiliarias baezanas de la época.
Nuestra Hermandad de “Las Escuelas” que tiene a San Juan de Ávila como cotitular desde el pasado año se sumó junto a la ciudad de Baeza a la propuesta de la declaración de San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia organizando diferentes actividades y celebraciones religiosas.
El Papa Benedicto XVI anunció su declaración como Doctor de la Iglesia el 20 de agosto de 2011 a petición de la Conferencia Episcopal Española, al finalizar la misa celebrada con motivo del encuentro con los seminaristas en la Catedral de la Almudena de Madrid, dentro de la Jornada Mundial de la Juventud.
Fuente: http://www.pasionenjaen.com/

viernes, 24 de febrero de 2012

¿TIENE SENTIDO AYUNAR?

¡Queridos hermanos y hermanas!

Al comenzar la Cuaresma, un tiempo que constituye un camino de preparación espiritual más intenso, la Liturgia nos vuelve a proponer tres prácticas penitenciales a las que la tradición bíblica cristiana confiere un gran valor —la oración, el ayuno y la limosna— para disponernos a celebrar mejor la Pascua y, de este modo, hacer experiencia del poder de Dios que, como escucharemos en la Vigilia pascual, “ahuyenta los pecados, lava las culpas, devuelve la inocencia a los caídos, la alegría a los tristes, expulsa el odio, trae la concordia, doblega a los poderosos” (Pregón pascual). En mi acostumbrado Mensaje cuaresmal, este año deseo detenerme a reflexionar especialmente sobre el valor y el sentido del ayuno. En efecto, la Cuaresma nos recuerda los cuarenta días de ayuno que el Señor vivió en el desierto antes de emprender su misión pública. Leemos en el Evangelio: “Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. Y después de hacer un ayuno durante cuarenta días y cuarenta noches, al fin sintió hambre” (Mt 4,1-2). Al igual que Moisés antes de recibir las Tablas de la Ley (cfr. Ex 34, 8), o que Elías antes de encontrar al Señor en el monte Horeb (cfr. 1R 19,8), Jesús orando y ayunando se preparó a su misión, cuyo inicio fue un duro enfrentamiento con el tentador.

Podemos preguntarnos qué valor y qué sentido tiene para nosotros, los cristianos, privarnos de algo que en sí mismo sería bueno y útil para nuestro sustento. Las Sagradas Escrituras y toda la tradición cristiana enseñan que el ayuno es una gran ayuda para evitar el pecado y todo lo que induce a él. Por esto, en la historia de la salvación encontramos en más de una ocasión la invitación a ayunar. Ya en las primeras páginas de la Sagrada Escritura el Señor impone al hombre que se abstenga de consumir el fruto prohibido: “De cualquier árbol del jardín puedes comer, mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás, porque el día que comieres de él, morirás sin remedio” (Gn 2, 16-17). Comentando la orden divina, San Basilio observa que “el ayuno ya existía en el paraíso”, y “la primera orden en este sentido fue dada a Adán”. Por lo tanto, concluye: “El ‘no debes comer’ es, pues, la ley del ayuno y de la abstinencia” (cfr. Sermo de jejunio: PG 31, 163, 98). Puesto que el pecado y sus consecuencias nos oprimen a todos, el ayuno se nos ofrece como un medio para recuperar la amistad con el Señor. Es lo que hizo Esdras antes de su viaje de vuelta desde el exilio a la Tierra Prometida, invitando al pueblo reunido a ayunar “para humillarnos —dijo— delante de nuestro Dios” (8,21). El Todopoderoso escuchó su oración y aseguró su favor y su protección. Lo mismo hicieron los habitantes de Nínive que, sensibles al llamamiento de Jonás a que se arrepintieran, proclamaron, como testimonio de su sinceridad, un ayuno diciendo: “A ver si Dios se arrepiente y se compadece, se aplaca el ardor de su ira y no perecemos” (3,9). También en esa ocasión Dios vio sus obras y les perdonó.

En el Nuevo Testamento, Jesús indica la razón profunda del ayuno, estigmatizando la actitud de los fariseos, que observaban escrupulosamente las prescripciones que imponía la ley, pero su corazón estaba lejos de Dios. El verdadero ayuno, repite en otra ocasión el divino Maestro, consiste más bien en cumplir la voluntad del Padre celestial, que “ve en lo secreto y te recompensará” (Mt 6,18). Él mismo nos da ejemplo al responder a Satanás, al término de los 40 días pasados en el desierto, que “no solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” (Mt 4,4). El verdadero ayuno, por consiguiente, tiene como finalidad comer el “alimento verdadero”, que es hacer la voluntad del Padre (cfr. Jn 4,34). Si, por lo tanto, Adán desobedeció la orden del Señor de “no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal”, con el ayuno el creyente desea someterse humildemente a Dios, confiando en su bondad y misericordia.

La práctica del ayuno está muy presente en la primera comunidad cristiana (cfr. Hch 13,3; 14,22; 27,21; 2Co 6,5). También los Padres de la Iglesia hablan de la fuerza del ayuno, capaz de frenar el pecado, reprimir los deseos del “viejo Adán” y abrir en el corazón del creyente el camino hacia Dios. El ayuno es, además, una práctica recurrente y recomendada por los santos de todas las épocas. Escribe San Pedro Crisólogo: “El ayuno es el alma de la oración, y la misericordia es la vida del ayuno. Por tanto, quien ora, que ayune; quien ayuna, que se compadezca; que preste oídos a quien le suplica aquel que, al suplicar, desea que se le oiga, pues Dios presta oído a quien no cierra los suyos al que le súplica” (Sermo 43: PL 52, 320, 332).

En nuestros días, parece que la práctica del ayuno ha perdido un poco su valor espiritual y ha adquirido más bien, en una cultura marcada por la búsqueda del bienestar material, el valor de una medida terapéutica para el cuidado del propio cuerpo. Está claro que ayunar es bueno para el bienestar físico, pero para los creyentes es, en primer lugar, una “terapia” para curar todo lo que les impide conformarse a la voluntad de Dios. En la Constitución apostólica Pænitemini de 1966, el Siervo de Dios Pablo VI identificaba la necesidad de colocar el ayuno en el contexto de la llamada a todo cristiano a no “vivir para sí mismo, sino para aquél que lo amó y se entregó por él y a vivir también para los hermanos” (cfr. Cap. I). La Cuaresma podría ser una buena ocasión para retomar las normas contenidas en la citada Constitución apostólica, valorizando el significado auténtico y perenne de esta antigua práctica penitencial, que puede ayudarnos a mortificar nuestro egoísmo y a abrir el corazón al amor de Dios y del prójimo, primer y sumo mandamiento de la nueva ley y compendio de todo el Evangelio (cfr. Mt 22,34-40).

La práctica fiel del ayuno contribuye, además, a dar unidad a la persona, cuerpo y alma, ayudándola a evitar el pecado y a acrecer la intimidad con el Señor. San Agustín, que conocía bien sus propias inclinaciones negativas y las definía “retorcidísima y enredadísima complicación de nudos” (Confesiones, II, 10.18), en su tratado La utilidad del ayuno, escribía: “Yo sufro, es verdad, para que Él me perdone; yo me castigo para que Él me socorra, para que yo sea agradable a sus ojos, para gustar su dulzura” (Sermo 400, 3, 3: PL 40, 708). Privarse del alimento material que nutre el cuerpo facilita una disposición interior a escuchar a Cristo y a nutrirse de su palabra de salvación. Con el ayuno y la oración Le permitimos que venga a saciar el hambre más profunda que experimentamos en lo íntimo de nuestro corazón: el hambre y la sed de Dios.

Al mismo tiempo, el ayuno nos ayuda a tomar conciencia de la situación en la que viven muchos de nuestros hermanos. En su Primera carta San Juan nos pone en guardia: “Si alguno que posee bienes del mundo, ve a su hermano que está necesitado y le cierra sus entrañas, ¿cómo puede permanecer en él el amor de Dios?” (3,17). Ayunar por voluntad propia nos ayuda a cultivar el estilo del Buen Samaritano, que se inclina y socorre al hermano que sufre (cfr. Enc. Deus caritas est, 15). Al escoger libremente privarnos de algo para ayudar a los demás, demostramos concretamente que el prójimo que pasa dificultades no nos es extraño. Precisamente para mantener viva esta actitud de acogida y atención hacia los hermanos, animo a las parroquias y demás comunidades a intensificar durante la Cuaresma la práctica del ayuno personal y comunitario, cuidando asimismo la escucha de la Palabra de Dios, la oración y la limosna. Este fue, desde el principio, el estilo de la comunidad cristiana, en la que se hacían colectas especiales (cfr. 2Co 8-9; Rm 15, 25-27), y se invitaba a los fieles a dar a los pobres lo que, gracias al ayuno, se había recogido (cfr. Didascalia Ap., V, 20,18). También hoy hay que redescubrir esta práctica y promoverla, especialmente durante el tiempo litúrgico cuaresmal.

Lo que he dicho muestra con gran claridad que el ayuno representa una práctica ascética importante, un arma espiritual para luchar contra cualquier posible apego desordenado a nosotros mismos. Privarnos por voluntad propia del placer del alimento y de otros bienes materiales, ayuda al discípulo de Cristo a controlar los apetitos de la naturaleza debilitada por el pecado original, cuyos efectos negativos afectan a toda la personalidad humana. Oportunamente, un antiguo himno litúrgico cuaresmal exhorta: “Utamur ergo parcius, / verbis, cibis et potibus, / somno, iocis et arctius / perstemus in custodia – Usemos de manera más sobria las palabras, los alimentos y bebidas, el sueño y los juegos, y permanezcamos vigilantes, con mayor atención”.

Queridos hermanos y hermanas, bien mirado el ayuno tiene como último fin ayudarnos a cada uno de nosotros, como escribía el Siervo de Dios el Papa Juan Pablo II, a hacer don total de uno mismo a Dios (cfr. Enc. Veritatis Splendor, 21). Por lo tanto, que en cada familia y comunidad cristiana se valore la Cuaresma para alejar todo lo que distrae el espíritu y para intensificar lo que alimenta el alma y la abre al amor de Dios y del prójimo. Pienso, especialmente, en un mayor empeño en la oración, en la lectio divina, en el Sacramento de la Reconciliación y en la activa participación en la Eucaristía, sobre todo en la Santa Misa dominical. Con esta disposición interior entremos en el clima penitencial de la Cuaresma. Que nos acompañe la Beata Virgen María, Causa nostræ laetitiæ, y nos sostenga en el esfuerzo por liberar nuestro corazón de la esclavitud del pecado para que se convierta cada vez más en “tabernáculo viviente de Dios”. Con este deseo, asegurando mis oraciones para que cada creyente y cada comunidad eclesial recorra un provechoso itinerario cuaresmal, os imparto de corazón a todos la Bendición Apostólica.

Vaticano, 11 de diciembre de 2008

Cargando La Cruz

II ENCUENTRO DIOCESANO DE NIÑOS







El 10 de marzo tendrá lugar el II Encuentro Diocesano de Niños en el Seminario Diocesano bajo el lema: "Amigos con Jesús". El Encuentro, organizado por la Delegación Episcopal para la Infancia y la Adolescencia, pretende ayudar a los niños a dar gracias a Dios por el extraordinario regalo de su amistad.
Todos los niños de nuestra provincia, de nuestra diócesis -de 8 a 12 años (3º a 6º de primaria)- están convocados este día para poder compartir y disfrutar juntos la alegría de ser amigos de Jesús. Será un día especial en el que seguro que harán nuevos amigos y lo que es más importante, podrán descubrir y valorar más si cabe la amistad que Jesús les ofrece.
El encuentro comenzará a las 10 de la mañana y finalizará aproximadamente a las cuatro de la tarde. Es importante que no se olviden de traer su propia comida y que cada monitor-acompañante tenga la autorización firmada por los padres. Se puede encontrar un modelo de autorización en la web http://www.saldeti.com



miércoles, 22 de febrero de 2012

ESTA TARDE IMPOSICIÓN DE LA CENIZA

A LOS NIÑOS EN LA PARROQUIA

A LAS 5 Y MEDIA

D. MANUEL, REFLEXIÓN PARA LA CUARESMA

EL SENTIDO Y EL QUEHACER DE LA CUARESMA DE HOY
INTRODUCCIÓN: Desde luego que las cosas han cambiado. Las abstinencias, los ayunos, los pequeños y grandes sacrificios no tienen buena prensa; y es más, la mayoría se preguntan por su sentido.
A pesar de todo, la Cuaresma es un tiempo “especial” para estudiar a la persona que siempre es asignatura pendiente. Para el cristiano es un tiempo para consolidad la fe y la vida cristiana.
Habrá que plantearse, por tanto, qué debemos hacer en este tiempo de Cuaresma, cómo debemos vivirlo.
SENTIDO DE ESTE TIEMPO: La Cuaresma el tiempo de preparación de la Pascua. En su origen, era el tiempo de preparación más directa e inmediata de los que querían hacerse cristianos (recibir el bautismo) en la Vigilia Pascual. Asimismo, era el tiempo en que los pecadores que habían roto decididamente con Dios y con la Iglesia, hacían penitencia para ser reconciliados el Jueves Santo y poder celebrar de nuevo la Pascua con toda la comunidad.
Nosotros ni tenemos que bautizarnos, ni somos grandes pecadores que hayamos roto decisivamente con la comunión con Dios y con la Iglesia. Pero, sin embargo, es importante que nos digamos a nosotros mismos: “Yo fui bautizado, yo llevo en mí la marca de Jesús, yo estoy sumergido en su vida nueva. Todo eso, ¿se nota realmente?, ¿no debería notarse más?, ¿en qué podría notarse más?” Y decirnos también: “Desde luego mi vida no está exenta de infidelidades. ¿Soy consciente de ello?, ¿soy capaz de ponerme ante Dios y el hermano y pedir perdón?”
Cristo será el punto de referencia. Fijaremos nuestros ojos en el camino nuevo que Jesús nos ha abierto con su fidelidad, para llegar a la Pascua habiendo renovado nuestra fe y nuestro bautismo, y habiendo renovado nuestra comunión con Dios y con los hermanos.
¿CÓMO HACERLO?: Hemos dicho que se trata de consolidar la fe, la vida cristiana, de darle impulso. Debemos decirnos a nosotros mismos que somos cristianos, que queremos serlo más, y que creemos firmemente que Jesucristo ha abierto en medio de nuestra historia el único camino que es absolutamente valioso. Y debemos mirar nuestra vida, hacer examen descubrir con limpieza de corazón qué nuevos paso podríamos dar.
En el Evangelio y en la Tradición se señalan tres actuaciones concretas: la limosna, la oración y el ayuno. Jesús habla de ellas en Mateo, 6,1-18, las valora, pero señala también el sentido que deben tener: tiene que salir de dentro y ser expresión del deseo de renovar la fe y la vida cristiana.
¿Qué significa y como pueden vivirse ahora la limosna, la oración y el ayuno?
LIMOSNA: Es dar dinero a los que pasan necesidad. Lo cual sigue teniendo hoy todo su valor, apoyando a instituciones como Caritas, Manos Unidas, Cruz Roja... Pero la limosna tiene otro nivel: la limosna de tu tiempo, de tu cultura... como servicio para alguien que lo necesite (enfermos, personas solas,...) o para trabajar en erradicar las causas de la pobreza y la desigualdad.
LA ORACIÓN: Es el espacio de silencio ante Dios, como elemento decisivo para reforzar la fe y la vida cristiana. Esforzarse por encontrar esos espacios: en ellos le presentamos nuestras ansias y esperanzas... o leemos los Evangelios, los Salmos... o participamos de la Eucaristía.
EL AYUNO: Hoy, que se tiene como ídolo el consumo, es difícil encontrarle sentido a privarse de cosas... Pero es importante combatir ese ídolo, para que las personas vivamos, no nos desvivamos. Ayunemos para la libertad y el amor, para liberarnos de las cosas ... y compartirlas.

CHARLA CUARESMAL ORGANIZADA POR LA AGRUPACIÓN ARCIPRESTAL DE COFRADÍAS









En la noche de ayer tuvo lugar una charla preparatoria para el tiempo que hoy comenzamos, la CUARESMA, organizada por la Agrupación Arciprestal de Cofradías.


D. Mariano Cabeza Peralta, consiliario, a traves del Via Crucis de Jerzy Duda, un polaco que se acercó a Dios a través de su enfermedad, fue reflexionando y llevando a nuestro día a día cada escena que iba introducida por una pregunta o titulo alusivo.


¿Quien mata a Jesús?. ¿Quien es la madre de Jesús? ¿Quien es el cirineo que ayuda a llevar la cruz?,¿Quien es la veronica en nuestros dias?, La soledad de Cristo, Cristo consuelo de la humanida, Lo que causa sufrimiento a Cristo, Cristo desnudo el mundo engalanado., El sufrimiento salva al mundo, Nuestras cruces la cuz de Cristo, Donde sepultaron a Cristo,
Con Cristo todos hemos resucitado, Y el nos espera en la Eucaristía. No tengais miedo.

COFRADÍA DE LA VERA CRUZ, SOLEMNE TRIDUO CUARESMAL



martes, 21 de febrero de 2012

REUNIÓN DEL MES DE FEBRERO DEL EQUIPO BAEZA-3


"LUCHAR" con este sugerente título trabajamos durante el mes y pusimos en común nuestra reflexiones. Quien no toma su cruz día a día, es decir, quien no da muerte incansable a un egoísmo que renace continuamente, quien no acepta los sufriemientos, pequeños o grandes, como medio de purificación, nunca ofrecerá el panorma de un amor radiante, de una religión atrayente.
Debemos luchar contra la autosatisfacción, la tranquilidad de conciencia, la convicción de ser honestos y a oración en el único antidoto, apartando de esta forma el fariseismo.
Entendemos la ascesis como un esfuerzo sistemático y perseverante para apartar los obstáculos al amor y cultivar aquello que lo favorece.
Tras el rezo del Magnificat, asistimos juntos a la celebración de la Eucaristía.
Finalizamos con un rato de convivencia.

¿QUIÉN?

lunes, 20 de febrero de 2012

PRESENTACIÓN DEL LIBRO DE SEMANA SANTA 2012











En la noche de ayer tuvo lugar la presentación del Libro de Semana Santa 2012 con una gran afluencia de cofrades y amigos, un gran trabajo del que prodremos disfrutar todos en breves días. Nuestra enhorabuena.


PARA LAS COFRADÍAS: el jueves 23 a partir de las nueve de la noche podrán retirar los libros y a partir de este mismo día se prodrán adquirir en los establecimientos habituales.

MOMENTOS DEL ENCUENTRO DE CÁRITAS












EL SÁBADO PASADO SE CELEBRÓ EL 4º ENCUENTRO ARCIPRESTAL DE CÁRITAS EN BAEZA



domingo, 19 de febrero de 2012

D. MANUEL PARA LA REFLEXIÓN

TÚ, SEÑOR, ME PERDONAS...

Cuando los cristianos revisamos nuestra vida, tratamos de no vivir presos del remordimiento del mal que hemos realizado o del bien que hemos dejado de obrar. Se trata de situarnos humildemente ante Alguien que nos diga que el futuro está abierto, que es posible andar en otra dirección, que es posible una vida nueva.
En el milagro del Evangelio de hoy, Jesús se manifiesta como Alguien que tiene poder para perdonar pecados. Alguien que puede mirarnos a los ojos y decirnos: ¡Tus pecados te son perdonados, comienza a vivir de nuevo!

La historia del pueblo de Israel es una historia de amor y de desamor con su Dios: un pueblo que se esconde en el caparazón de su pecado, y su Dios que le busca con amor de Padre. Es una historia dramática en la que siempre, al final, puede el amor. Y Dios es Amor.

La presencia de Jesucristo, el Hijo de Dios en medio de nosotros, es el culmen de esta historia: Dios nos quiere salvar del pecado, nos quiere devolver la dignidad de hijos perdida por nuestro orgullo. Y nos envía a su propio Hijo, para compartir nuestra vida en todo “menos en el pecado”, e invitarnos a que cada uno de nosotros compartamos la vida de Dios.

Por eso, el hombre, ante Dios, no debe dejarse llevar por el amargor del remordimiento, quedando paralizado en el pasado de su vida, sino que arrepentido, ante su Señor, le dice: ¡Tú, Señor, puedes sanarme! ¡Tú, Señor, puedes perdonarme y darme de nuevo la vida!

Es más fácil quitar muletas que quitar pecados. Hoy, en la soledad del hombre moderno, no sólo necesita que le den la buena noticia de la curación del cáncer, de la vacuna anti-sida, sino que necesita oír de nuevo, con voz más fuerte, que hay alguien ante quien podemos pedir perdón, Alguien del que podemos escuchar: “¡Tus pecados te son perdonados, vete en paz y no peques más!” Entonces, el horizonte de la vida se ensancha y se hace luminoso.

LECTURAS Y SALMO

REFLEXIÓN EVANGÉLICA

viernes, 17 de febrero de 2012

RETIRO ESPIRITUAL INTERPARROQUIAL

Dirigido a los catequistas de nuestras parroquias pero abierto a todo el que quiera participar será el Sábado 18 de Febrero, de 5 a 9 noche en la Parroquia de El Salvador. Nos servirá para prepararnos para el tiempo cuaresmal.
Se ruega a los participantes traigan Biblia y bloc de notas, también ser puntuales.
¡Prepara tu espíritu para un tiempo apasionante!

ATENCIÓN COFRADES

El MARTES 21 DE FEBRERO, a las nueve de la noche en la Agrupación de Cofradías tendrá lugar la CHARLA CUARESMAL, a cargo de nuestro Consiliario y Párroco de El Salvador, D. Mariano Cabeza Peralta.

Finalmente, el MIÉRCOLES DE CENIZA, día 22 de febrero, celebraremos la EUCARISTÍA de este día. Este año, por motivos de reformas en la Santa Iglesia Catedral, se traslada a la PARROQUIA DE EL SALVADOR, manteniendose la misma hora (21 horas)

jueves, 16 de febrero de 2012

CARTA PASTORAL, CUARESMA 2012

Queridos fieles diocesanos:
El próximo día 22 de febrero, Miércoles de ceniza, iniciamos el camino cuaresmal que nos conducirá hasta la gran fiesta de los cristianos: la Pascua de Resurrección. Será, este año, el Domingo 8 de abril. Son días de conversión personal y comunitaria que pasa por la oración y el ayuno, por la renuncia y humildad. Nuestro encuentro personal con Jesucristo nos llevará a verle también en los hermanos.
Al imponérsenos la ceniza la Iglesia suplica ante el Señor que nos fortalezca con su auxilio “para que nos mantengamos en espíritu de conversión y que, la austeridad penitencial de estos días, nos ayude en el combate cristiano contra las fuerzas del mal”.
1. Pensemos que el anuncio de la Cuaresma tiene un contenido alegre y gozoso. Es para crecer en libertad, creatividad y para interiorizar y seguir la gran verdad: Jesucristo. Con Él y en Él salimos de la mediocridad hacia la novedad. Rejuvenece nuestro bautismo, abre sus brazos Dios y nos transforma con su cercanía.
Es tiempo de romper ataduras fuertes, por la lejanía de Dios, o de hilos de araña, que también nos retienen, como caprichos que nos impiden mirar con más libertad a lo alto y reconocer que Dios nos quiere, que está en nuestros hermanos.
Es un recorrido para salir de nuestras rutinas, mirar al horizonte pascual y caminar por la senda de la fe y del amor. Hacer “una ruta nueva” abandonando lo que es “nuestro”, como hizo Abraham y todos los que ponen su confianza en Él, para encontrar la novedad que siempre esperamos. Despertemos del sueño.
2. Es camino hacia la Pascua:
- Reconocer nuestra mentalidad mundana que se nos pega a todos, aun sin buscarlo. Nos encanta ser “pequeños dioses” e independizarnos del Señor. Por eso el ejercicio de nuestro encuentro diario en la oración, durante este tiempo, es crucial. Jesús, oíamos hace pocos domingos: “Se levantó de madrugada, se marchó al descampado y se puso a orar” (Mc. 1, 35).
- Convencernos interiormente de que hacemos este camino para vivir y no para “fastidiarnos”. La Cuaresma no es sobre todo para instruirnos en algo, sino para iniciarnos o profundizar en el misterio de la muerte y resurrección de Jesús. Si hay muerte en nuestra vida, si hay ayuno y penitencia, es porque con ello anunciamos y buscamos algo nuevo: encontrarnos con la Vida que es Cristo y, con Él, participar de su Resurrección. Ayunamos para encontrarnos con el alimento verdadero. “Está escrito: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” (Mt. 4, 4).
- Compartir lo que tenemos en nuestro corazón y en nuestras manos. Las cosas innecesarias sofocan la voz interior y la de Dios. El confort suele anquilosar el corazón y hacerlo pequeño. En nuestro recorrido cuaresmal debe destacar la caridad fraterna y la limosna, el desprendimiento alegre de lo nuestro para los demás. Jesús alabó la limosna de una viuda pobre: “Ha echado, dijo, todo lo que tenía”.
3. Como en años anteriores Su Santidad, Benedicto XVI, nos ha enviado un profundo y claro Mensaje para esta Cuaresma. Lleva por título: “Fijémonos los unos en los otros para el estímulo de la caridad y de las buenas obras” (Hb. 10, 24).
Nos invita: “a confiar en Jesucristo como Sumo Sacerdote, que nos obtuvo el perdón y el acceso a Dios”. Esta acogida a Cristo, dice el Santo Padre, tendrá sus frutos: una vida que se despliega según las tres virtudes teologales: fe, esperanza y caridad.
Destaca el Papa también que, para estos logros, es muy importante participar en los actos litúrgicos y en la oración de la comunidad cristiana.
Ruego, de forma especial, a los sacerdotes que, haciendo “nuestro” el Mensaje del Santo Padre, traslademos luego antes nuestros fieles encomendados los tres aspectos fundamentales de la vida cristiana que se desarrollan en el mismo: la atención al otro, la reciprocidad y la santidad personal.
Renovemos también, como Pastores, nuestra disponibilidad, muy especial durante todo este tiempo, para atender el ministerio de la reconciliación, no sólo de forma comunitaria, sino también de forma individual, al tiempo que exhortamos a todos los fieles a este encuentro alegre con Dios Padre que nos regala, en su Hijo, el perdón de nuestros pecados.
Con mi saludo agradecido en el Señor.
+ Ramón del Hoyo López
Obispo de Jaén

domingo, 12 de febrero de 2012

D. MANUEL, DOMINGO VI DEL TIEMPO ORDINARIO: PARA LA REFLEXIÓN

“SI QUIERES... PUEDES LIMPIARME”
Nos ha tocado vivir en un mundo, en una sociedad que no soporta la fealdad, que vive de la apariencia y de la fachada. Hemos hecho un mito de “lo joven, lo bello...” Y se quiere ofrecer una visión de la vida en la que “la moda” es sinónimo de juventud y belleza. A esta sociedad no le agrada que le muestren sus defectos, los oculta… Y esto no es nuevo; ya en tiempos de Jesús se ocultaba la pobreza, se marginaba la enfermedad, se consideraba maldito al que estaba impregnado de lepra. Este debía vivir fuera de la ciudad. La enfermedad es “fea” y conviene no verla.
Jesús, sin embargo, se acerca a los leprosos varias veces a lo largo de su vida… Y con este gesto, el Maestro, no sólo está haciéndose prójimo de un enfermo, sino que está tomando parte por los más marginados, por los que menos cuentan, por aquellos que incluso son considerados pecadores por su apariencia: por los que no han triunfado en la vida. Así la Buena Noticia del Evangelio es un pregón de justicia. Y los frutos de la justicia verdadera constituye a cada hombre en hermano, y al mundo entero en un reino de convivencia.

El pasaje del Evangelio es de una ternura impresionante. El leproso, con la mirada baja, simplemente insinúa al Señor: “Si quieres...puedes limpiarme”. El l relato evangélico es claro y dice que el Señor le tocó: porque el amor no guarda distancias. Y mirándole a los ojos le responde: “Quiero, queda limpio”. La lepra le desapareció de su piel.
Y surge un hombre nuevo: Aquel leproso no sólo quedó limpio en su piel, sino que por primera vez, alguien le ha mirado con cariño, se ha unido a su dolor, le ha tocado y le ha dicho una palabra de amor. Aquel leproso se convirtió en un mensajero de este milagro y de su autor.: “iba por todas partes hablando de Jesús”
Difícilmente los cristianos podemos anunciar un reino de justicia y fraternidad, si no nos acercamos a los que menos cuentan por su apariencia: hay que buscar a los nuevos leprosos y tomar partido por ellos. Y junto a la solidaridad, anunciarles la Buena Noticia del Reino de Dios, que viene especialmente para ellos.

LECTURAS Y SALMO

REFLEXIÓN EVANGÉLICA

jueves, 9 de febrero de 2012



ESTA TARDE A LAS 19 HORAS

CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA

EN NUESTRA PARROQUIA

EN ACCIÓN DE GRACIAS

POR EL BUEN DESARROLLO DE LAS ACTIVIDADES

ORGANIZADAS POR MANOS UNIDAS

DELEGACIÓN DE INFANCIA Y ADOLESCENCIA, ENCUENTRO EN JAÉN











Desde la Delegación de Infancia y Adolescencia se pretende crear un cauce de nueva evangelización del sector de adolescentes desde un encuentro cercano con Cristo Jesús que transforme la vida del adolescente hacia una fe viva.

Para ello tendrá lugar un encuentro entre los agentes de pastoral de la Diócesis para acercar posturas y buscar cauces para la evangelización de adolescentes. Será el 11 de febrero, a partir de las 10 de la mañana en el Seminario Diocesano de Jaén.

¡Estamos todos invitados!

LOS COFRADES, PARTICIPES DE LA NUEVA EVANGELIZACIÓN

UNA DOCTRINA NUEVA, EXPUESTA CON AUTORIDAD. MANDA HASTA LOS ESÍRITUS INMUNDOS Y LE OBEDECEN… Mc. 1,14-15
QUÉ ES EVANGELIZAR
Evangelizar es la misión permanente de la Iglesia, de cada uno de sus miembros y de sus instituciones, puesto que ella exista para evangelizar. Evangelizar es anunciar y dilatar el Reino de Dios, llevar a efecto con la gracia divina la obra de la salvación mediante la transformación profunda de la mente y del corazón. Comprende la unidad indisoluble de signos y palabras y conduce a la conversión y a la fe vivida en comunión, celebrada en los sacramentos e irradiada por la caridad y el apostolado.
Desde el año 1.983 el Papa Juan Pablo II puso a la Iglesia en estado de nueva evangelización, en estado de misión. ¿A qué obedecía esa convocatoria y qué pretendía? El mismo Papa no cesaba de explicitar los motivos y los fines de esta renovada evangelización en distintos documentos.
La nueva evangelización obedece a la situación de descristianización de naciones con raíces cristianas. Es una evangelización renovada:
En el anuncio kerigmático del Evangelio, en la llamada a la conversión, en la agregación y dinamismo de la comunión, en la reordenación interna y misionera de la Iglesia y de sus instituciones, en la instauración del Reino de Dios en el corazón de la sociedad como alma de la civilización del amor.
Es autoevangelización y anuncio misionero desde la nitidez del testimonio. Es en sí misma un cambio que ha de ser fruto de la experiencia del Dios de Jesucristo y de su protagonismo. Se trata de dar un nuevo ardor, método y expresión a la obra de la evangelización. Radica en la inalterable Buena Nueva de la persona y de la obra de Cristo, que siempre es perenne novedad, perenne necesidad y perenne misión.
NOS PIDE A TODOS SITUARNOS EN EL DINAMISMO DE LA CONVERSIÓN
El espíritu de la nueva evangelización brota del dinamismo de la conversión. Es un cambio de las actitudes, de las estructuras, y de los métodos; es poner en práctica la lógica del vino nuevo en odres nuevos (Mt 9,14-17). Es una vitalización de la experiencia de Dios en los individuos y en las comunidades, retomando el dinamismo de la conversión permanente y la vocación a la santidad, e impregnando de este espíritu la vida de las instituciones… Este espíritu de conversión mantendrá viva la conciencia de la gracia bautismal y dispondrá para vivir la Eucaristía como eje de toda la existencia humana. De aquí surgirán nuevas actitudes y estilos de vida familiar, de vida parroquial y asociativa y del ejercicio de la acción pastoral y apostólica.
La nueva evangelización implica ruptura, pues sitúa el corazón del paso del hombre viejo al hombre nuevo, dando cauce a la fuerza del espíritu nuevo dócil a la obediencia de la fe en comunión misionera, sacando lo viejo y lo nuevo (Mt.13, 51-52). Ha de suscitar un nuevo talante en las actitudes personales y en el desempeño de las responsabilidades; ha de facilitar la interacción entre la vida teologal y sacramental, entre la Palabra, la Liturgia y la Caridad, entre la fe y la vida. La nueva evangelización ha de ser luz, semilla, fermento y sal de la tierra.
NUESTRAS HERMANDADES Y COFRADÍAS
Toca a cada uno y a las asociaciones poner en común la apertura, la búsqueda y la práctica del espíritu de la nueva evangelización. En este empeño las Hermandades podrán abrir caminos para una nueva piedad popular, enraizada en la liturgia vivida y celebrada de acuerdo con la fe de la Iglesia; o una piedad cristiana renovada en su ardor, en su expresión y en su método; para unas nuevas juntas directivas en su preparación, en su elección, en su vida y en su actividad, para unos nuevos cabildos generales impregnados del evangelio, para una nueva inserción eclesial y una cristiana y apostólica relación con la sociedad y sus instituciones…
Para la autenticidad de la vida del cofrade y su proyección misionera, la nueva evangelización ha de seguir abriendo un camino de renovación permanente, no escatimando esfuerzos para favorecer el anuncio del Evangelio, la catequesis y la erradicación de la ignorancia religiosa; desde la comunión de la mente y el corazón acoger las enseñanzas del Magisterio de la Iglesia y hacer del “Catecismo de la Iglesia Católica” un amigo inseparable en el camino de la fe, armonizando el conocer y el amar. Se trata, en definitiva, de seguir, amar y dar a conocer al Maestro, como les decía Benedicto XVI en Cuatro Vientos a los jóvenes el 22 de Agosto pasado: “De esta amistad con Jesús nacerá también el impulso que lleva a dar testimonio de la fe en los más diversos ambientes, incluso allí donde hay rechazo o indiferencia. No se puede encontrar a Cristo y no darlo a conocer a los demás. Por tanto no os guardéis a Cristo para vosotros mismos. Comunicad a los demás la alegría de vuestra fe. El mundo necesita el testimonio de vuestra fe, necesita ciertamente a Dios. Pienso que vuestra presencia aquí, jóvenes venidos de los cinco continentes, es una maravillosa prueba de la fecundidad del mandato de Cristo a la Iglesia: “Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación” (Mc 16,15)”
D. Manuel Peláez Juárez, Párroco de San Pablo.

miércoles, 8 de febrero de 2012

REUNIÓN DEL GRUPO DE LAICOS FILIPENSES



El pasado fin de semana se volvió a reunir el grupo de laicos filipense, de una manera especial, pues recibimos a la hermana María Luisa venida de Palencia.

Habló y se compartió sobre la Pedagogia de la Esperanza y sobre la resiliencia. Tratando sobre los elementos resilientes como son el temperamento personal, el apoyo social o la condición comunitaria, la forma de manejar la memoria, la mirada personal y el sentido del humor.

Todos somos diamantes y debemos positivizar los defectos que tenemos, sacar lo bueno de los malo.

Se necesita llevar una vida más sosegada, más reflexiva y teniendo en cuenta cuales son las prioridades.

"No me están matando estoy entregando la vida, soy libre en la aparente esclavitud" Jesús de Nazaret.

También informó sobre el Congreso Nacional de Laicos en España, sus objetivos, acciones y el manifiesto de los laicos filipenses.

Por ultimo y antes de despedirnos con una salutación a la Virgen nos comunicó la creación de una web filipense, www.rfilipenses.com

martes, 7 de febrero de 2012

ASAMBLEA AGRUPACIÓN ARCIPRESTAL DE COFRADÍAS









Tras la oración, se hace lectura del acta de la sesión anterior que es aprobaba por toda la asamblea.

Las actividades cuaresmales quedan de la siguiente manera:

21 de febrero, charla cuaresmal a cargo de D. Mariano Cabeza

22 de febrero, Miércoles de Ceniza, a las 21 horas en la Catedral

La celebración comunitaria de la penitencia queda pospuesta al Viernes de Dolores

La presentación del programa de Semana Santa 2012 el domingo 19 de febrero a las 20.30 horas en la UNIA,

LA MEDALLA DE ORO, queda desierta por no haber propuestas suficientes.

Se presentas las colgaduras que irán situadas en la carrera oficial.

RUEGOS Y PREGUNTAS

La Cofradía de la Columna manifiesta su malestar por encontrar que se duplican actos relacionados con la Semana Santa y esto afecta a su cofradía. Agradece la buena disposición de la Cofradía del Calvario pero lamenta el no advenimiento con la Asociación Cultural El Capirote

El presidente comunica que una deuda de corriente con el Ayuntamiento quedará subsanada y compensada con la deuda que este mantiene con la Agrupación de Cofradías.

Para finalizar D. Mariano nos facilita una relación de estipendios de los servicios religiosos, manifestando que esos ingresos suponen una ayuda al mantenimiento y conservación de las parroquias.

También animó a participar de todas las actividades en esta cuaresma.

Se terminó con una oración.