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domingo, 9 de septiembre de 2018

REFLEXIÓN DE DON MANUEL

DOMINGO XXIII DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO “B”

     “Mirad a vuestro Dios, viene en persona…” Nos dice el ProfetaIsaías hoy. Es el desquite de Dios, su venganza contra las fuerzas del mal. Es la realización de un mundo nuevo que Jesucristo su Hijo realiza.

     1.- “Le presentaron un sordo que apenas podía hablar”

     El enfermo que se acerca  a Jesús es representante del dolor y de la esperanza de la humanidad entera. Es la descripción simbólica de nuestra indigencia.
     El gesto de Jesús es como un sacramento  del amor de Dios, es un signo de la plenitud, de la vida que solo Dios otorga.
     Hoy le acercan a Jesús un sordomudo. Y le toca y le cura. Si echamos una mirada profunda sobre la humanidad… descubriremos, bajo el griterío humano, un conjunto de sordos y mudos, Y Jesucristo los cura, es decir abre los oídos y desata las lenguas; el oído y la lengua del corazón, de la vida…

     2.- Dice el Evangelio que Jesús le metió los dedos en los oídos y con saliva le toco la lengua… y le dijo: “Ábrete”.
Los seres humanos solemos estar cerrados a la verdad… Cada uno guiado por sus categorías, vamos corriendo, cerrados a la luz, encerrados en nosotros mismos, incapaces de escuchar a los demás (lo que dicen). Y Dios por medio de Jesús, en medio de este mundo, rompe las ataduras. Por eso el gesto de Jesús que toca con el dedo, es un pequeño signo de toda su persona que anuncia al Dios vivo y habla de la vida plena.

     Cuando Jesús toca el oído realmente es cuando dice:“Dichosos los que trabajan por la paz” ó “No sólo de pan vive el hombre…” ó “Reunid tesoros que nos se echen a perder”, ó Dios es Padre que acoge al hijo que vuelve y que perdona setenta veces siete”…
     La gran verdad sobre Dios y sobre el hombre que Jesús revela y manifiesta con su vida es cuando Jesús con su Palabra y con su Gracia abre el oído y penetra en el corazón, hasta suscitar el asentimiento y la entrega.

     Así, cuando la persona experimenta que se le abran los oídos interiores a la experiencia de Jesús, de su luz, de su gracia, INMEDIATAMENTE SE LE DESATA LA LENGUA. Deja de hablar superficialidades, deja de dar importancia a cosas que no la tienen y HABLA DE LA VERDAD, de la justicia, de la paz; habla de la clase de persona que hay que ser y que Dios ama. Entonces toda su persona anuncia y hace posible otro mundo.
     El mismo Jesús dijo: “De la abundancia del corazón, habla la lengua”. Cuando el corazón se abre a las bienaventuranza, a la cruz, a la resurrección, al amor, la lengua habla de la alegría del servicio, de la esperanza…

     3.- “Al momento se le abrieron los oídos y se le soltó la traba de la lengua y hablaba sin dificultad”.
     El sordomudo es además de signo de otra realidad: Las personas, acostumbradas a vivir encerradas, los unos para con otros, ignorándonos, pasando de largo, no nos sabemos escuchar y no sabemos hablar. Pasa en la familia, en el trabajo, entre amigos. La obra de Dios consiste en hacer posible que los hombres salgamos del recinto cerrado, de nuestro castillejo, y nos comuniquemos.

4.-Aplicacíon: Hoy sigue Jesús realizando el desquite de Dios: Sacramentos, Palabra, Iglesia por ti.
    Posturas: Ábrele, déjate tocar por Él. Tu vida, tu lengua, proclamarán las maravillas de Dios.

     EUCARISTÍA: Apertura a Dios y a los hombres.     
                             Alabanza y acción de gracias

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